Sally Torres: moda atemporal (EN PORTADA)
Fotos por Tahir Narváez (@txhir). Espacio: Universidad Sagrado Corazón.
En Trasiego, nos encanta destacar a creativos locales que hacen de su pasión una propuesta con propósito. Por eso, para nuestra portada de otoño (que parecía no llegar, pero claro que llegó), conversamos con Sally Torres Vega, una diseñadora puertorriqueña que ha pasado más de 15 años representando la moda atemporal.
Sus diseños se destacan por el uso de tintes y fibras naturales, por el profundo respeto al proceso de confección de cada pieza y por las distintas posibilidades de combinación. Sally convierte sus experiencias de vida y estilos estudiados en inspiración, y crea su propio lenguaje creativo que parte de la elección del textil, la forma y el color. Para ella, el proceso siempre comienza de manera orgánica: “Mi mesa de comedor está llena de muestras de tela durante meses. Me siento, quito aquí, añado allá, combino esto con lo otro… Todo fluye con el tiempo”. Aunque trabaja con una base de colores neutros como el blanco y el negro, a veces añade un color de acento, buscando que cada pieza sea versátil y duradera.
Un inicio entre telas y creatividad
Desde pequeña, Sally mostró una inquietud creativa que la llevó a experimentar con la costura y la ilustración.
“Siempre me interesó coser e ilustrar, esas fueron mis inquietudes desde pequeña”, cuenta. Aunque comenzó estudiando Administración de Empresas en la UPR de Bayamón, fue explorando sus gustos como estudiante en la Escuela de Artes Plásticas y más tarde en el Departamento de Drama de la UPR. Entre el vestuario para teatro y la producción creativa, Sally empezó a moldear su propio camino en el diseño.
Viniendo de familia con don para la costura, Sally fue autodidacta al comienzo de su recorrido, hasta que decidió aprender más a fondo sobre técnica. Fue así como llegó a la Escuela de Diseño Lisa Thon y, adquiriendo las herramientas que necesitaba, continuó su proceso.
Sin embargo, el inicio oficial de su marca llegó en 2008, a la par con su primera hija. “Fue como criar dos bebés a la vez”, recuerda entre risas. Desde entonces, ha ido probando distintos modelos para su negocio, buscando siempre la mejor manera de mantener una conexión cercana y personal con su proceso creativo, y su compromiso con la moda consciente.
Influencias japonesas y un enfoque personal
Durante nuestra conversación, no tardamos en llegar a la fascinación de Sally por el diseño japonés. En su tiempo formativo en la Escuela de Artes Plásticas, fue influenciada por maestros que la expusieron al trabajo de diseñadores japoneses y la adentraron en una inquietud creativa de buscar más a través de libros, revistas, periódicos, y todo lo que encontrara. “Creo que tiene mucho que ver con el fit”, comenta la diseñadora. “Pero también hay mucha referencia histórica (en las piezas)”, continuó, usando el zipper de ejemplo y cómo lo que se usaba antes eran botones o simplemente amarres. Esto mismo ha ido aplicando a sus diseños.
Moda ética desde el sentido común
Una de las características que definen a Sally es su firme compromiso con la moda ética, desde distintas perspectivas. Pero, como ella misma explica, no fue algo que planeó deliberadamente.
“No decidí ser una marca ética porque estaba de moda; para mí fue simplemente sentido común”, destacó la diseñadora. Siendo ella misma quien cose muchas de sus piezas, entiende perfectamente el valor del trabajo manual, haciéndolo parte de su misión.
El enfoque ético de Sally también abarca el uso de fibras y tintes naturales. Al no contar con los recursos o suplidores durante sus comienzos, buscó opciones más sostenibles para diseñar e incluso a hacer sus propios colores para las piezas. Con el tiempo, se dio cuenta del impacto positivo de estas decisiones y desde entonces intenta maximizar su trabajo con materiales que sean respetuosos con el medio ambiente e, incluso, el cuerpo.
“No uso poliéster, porque es plástico y no le hace bien al cuerpo. También, el tiempo que tarda una pieza de poliéster en desintegrarse... De ahí mi decisión a solamente utilizar fibras naturales; el impacto que puede tener es menor y es más amigable para nuestro clima caribeño y para otros climas”, explica.
Atemporalidad y versatilidad: piezas que trascienden
Uno de los aspectos clave de la propuesta de Sally Torres es su apuesta por la moda atemporal. Cada pieza que diseña busca ser versátil y tener una vida útil más allá de las tendencias pasajeras. “Me encanta la idea de que una prenda pueda usarse por mucho tiempo y se pueda combinar con múltiples piezas que tiene ya tu closet e incluso piezas de otros diseñadores”, explica Sally. “Sé de hijas que le cogen piezas prestadas a su mamá o mamá que le coge piezas prestadas a su hija… Me encanta eso”, añade.
Durante su proceso creativo, la diseñadora explora mucho la longevidad y funcionalidad de una pieza, pensando también en todo el movimiento que tenemos en el día a día. “Por ejemplo, uso muchos amarres en mis piezas, lo que permite que se adapten al cuerpo en diferentes etapas de la vida. No quiero que alguien me diga que una pieza ya no le sirve después de un año”, comenta, reflejando su misión de crear moda que tenga múltiples vidas.
“No necesariamente tengo una historia detrás de las piezas, pero ese es el detalle.. Que cada cual cree su historia”.
Made-to-order: Producción personalizada y responsable
Sally ha adoptado un modelo made-to-order, que significa que no produce piezas en masa. En cambio, espera a que los clientes hagan un pedido para crear la prenda. “Esto evita la sobreproducción y hace un uso más eficiente de los materiales”, explica. Además, le permite ofrecer una experiencia más personalizada y controlada sobre la calidad de cada pieza de ropa.
El presente y futuro de Sally Torres
Actualmente, además de diseñar, Sally ejerce como educadora en la Universidad de Sagrado Corazón. También, contemplando que no son experiencias que tuvo en sus comienzos como estudiante, ha decidido crear oportunidades abriendo su taller a interns y distintas personas que desean hacer prácticas.
Cuando le preguntamos sobre el futuro de su marca, aún reconociendo las dificultades de la industria en Puerto Rico, la diseñadora comparte que le gustaría tener su propio espacio de venta donde pueda recibir a los clientes directamente. Sin embargo, no cierra puertas a lo que decida traer el tiempo: algo que aprendió a hacer a lo largo de sus rumbos creativos y de exploración.
En un mundo donde la moda rápida es la norma, Torres apuesta por una moda que es tanto atractiva como consciente, confeccionando piezas que vivan en diferentes contextos, siluetas y funciones. Para seguir su trayectoria o conocer más de sus piezas, visita sus página web o redes sociales: sallytorresvega.