Mood swings: ¿Cómo minimizar su llegada de la noche a la mañana?
¿Alguna vez te has levantado con los ánimos por el piso y, como dicen por ahí, con el pie izquierdo sin razón alguna? Los cambios de humor de la noche a la mañana, o los tan conocidos “mood swings”, son el real deal. Aunque a veces parecen no tener precedente, ciertos hábitos antes de dormir pueden estar afectando nuestro estado emocional y pueden alterar cómo nos levantamos al día siguiente.
Según Healthline, hay 4 tips que te pueden ayudar a afrontar esos overnight mood changes o a minimizarlos para que no ataquen tan fuerte al próximo día.
Evita las distracciones y comienza el proceso de relajación al menos una hora antes de dormir.
Esto le permitirá a tu mente despejarse de manera más eficiente y activar el “modo descanso”. Dormir al menos 7 horas y tener descanso de calidad es clave para determinar cómo te levantas al próximo día, pues puede aumentar tus energías, concentración y productividad.
No mezcles espacios.
Idealmente, todo lo que sea trabajo debe permanecer fuera de tu área de descanso. Tu mente y cuerpo deben acostumbrarse y tener claro que tu habitación es un espacio stress-free, donde la mente puede estar en calma sin pensar en el próximo to-do list.
Evita las pantallas y luces muy fuertes.
Es recomendable no tener en tu habitación televisores o pantallas grandes que puedan distraer tu mente del descanso. Además, lo último que ves y en lo último que piensas antes de dormir, importa. Esto puede afectar tu ciclo de descanso e, incluso, puede alterar tus sueños, pues es información que se mantiene en tu subconsciente. ¿Cuántas veces no te has levantado agitado, con miedo o pesado luego de un sueño fuerte? Puede que tenga que ver con tus interacciones y acciones de la noche anterior.
Limita el alcohol y la cafeína.
Según Very Well Health y Sleep Foundation, es recomendable detener el consumo de alcohol (y cafeína) al menos 4 horas antes de la hora de dormir, ya que tienden a disminuir la calidad del sueño y a aumentar las interrupciones del ciclo de descanso. Además, el alcohol es considerado un depresor del sistema nervioso central, lo que automáticamente puede alterar tu estado de ánimo aún cuando decides sleep it off.
Si te encuentras sin poder controlar tus cambios de humor y/o parecen estar presentes muy a menudo, recuerda acudir a un profesional de la salud mental. ¡Es el mejor tip que podemos dar!
